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Se acercan las horas para pedirme perdón.
El tiempo pisa descalzo.
Entre lo espeso del conflicto,
los remolinos de un milagro me arrastran al punto
donde la vida son escenas bohemias-imperfectas
de una película que no quiere director,
que no quiere toma 2, que no quiere funciones,
ni maquillaje, ni post-producción.
Aquí me encuentro,
escenografías naturales, espacios del amor,
entre un árbol que sueña con dar paltas,
en el pulmón de una manzana de edificios domino
de luces desparejas y parejas,
estrellas-canciones
entonando las melodías que desata
...un Sillón Celeste Corazón.
Lugar
con una mesa acuática, y tus idas y venidas,
desprendiendo tu calor.
Aspiro,
divinidad de deja vu, de inexplicable entendimiento,
la cocina sabe callarme pensamientos-
Vos desde un espejo siempre me miras igual.
Surgís desde lo invisible.
Buscándome,
subís
a tus puntitas de pie,
para colorear,
a base de sonrisas,
la naturaleza que nos libera,
que nos canta,
que nos imagina,
que nos pellizca,
que nos
pellizca sueños... que viven para no despertar.
Dice a mis ojos.
Los ojos míos de la calle,
los que ahora aprenden a ser mimados,
los que ahora respiran del vapor que libera tu boca,
como una sopa que deja su humo libre
para hacerse sabor en los sentidos.
Y sin dejar de ser salvajes,
ojos caballeros, los míos,
que te dejan pasar, una y otra vez,
a mis rincones más modestos,
a mis esquinas más incompletas.
Cuando mis manos, que no buscan,
son atraídas por tu cadera,
y el poema no pierde el sentido de sentir,
y gana todo lo que no se ve,
mis manos que son atraídas
por tu cintura
que me festeja las muecas menos movedizas
mientras
tu cuello ejerce su soberano poder sobre mí.
El aire es de nubes cargadas de sol
La casita azul que nos guarda,
nos trae a nosotros,
para que bebamos de nuestros ríos
y comamos de nuestros mares,
para enseñarnos
a esperar juntos
la noche en que las noches,
dejen de ser segundos.
lunes, 31 de mayo de 2010
jueves, 27 de mayo de 2010
miércoles, 5 de mayo de 2010
De tu cuerpo una letra


Te extraño tanto que juego al solitario
con las cartas que te escribo.
Y te mando un mensajito
que dice la nada ardiendo
mientras acá el todo se come los mocos.
Te extraño
y es tan fácil hacerlo después de conocer las llamas
que hacés brotar en este corazón despeinado.
Y las palabras siempre son las mismas de otro color
y me importa mucho que sepas que quiero olerte,
olerte hasta perder los agujeritos de la nariz.
Esos dos agujeritos que si hablaran de tu perfume
quedarían mudos de placer-
Te extraño segundos afrodisíacos
que se guisan en salsas lujuriosas
saladas y con la cebolla acaramelada de tu ser.
No hay impaciencia más voraz
que la que haces latir en mí tiempo
cuando desespero por dos gramos de tus gestos privados,
de tus piernas cuando veo la sed.
Te extraño con el silencio en las garras
con el calor vivo de frío
con el sueño carnívoro chupando un chupetín.
Te extraño
y si te tuviera acá
destaparía el pegamento
que invento Dios para los dos,
lo haría llover del tarro
para que nos bañemos en él
mientras te desgajo
con las manos que me sobran cuando te miro
y león a leona
leona a león
hacernos eso lindo que llamamos amor
sabiendo en lo oscuro
que tu sillón es el cielo
que despegarnos es poner un pie en el infierno.
Te extraño y cuando te vea
haré de tu cuerpo una letra
que no se pueda pronunciar.



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